27 de febrero de 2012

TRAVESÍA MALVARROSA (PATONES)

Esta última semana ha sido de esas que parece que todo se junta y piensas que podrías haberlo asimilado mejor si se hubieran producido en un espacio de tiempo más amplio, no obstante cuando esto ocurre en vez de quejarte, lo mejor es disfrutar, si se puede, de cada día y de la actividad que en ella se te ofrece.

Pero de todas ellas, unas se pueden contar y otras no. Las demás son solo interesantes para mí, aquí solo pondré una, que es la de cumplir con una vía de escalada que llevaba tiempo queriendo hacer, no por su dificultad o lejanía, pero que los dioses no dejaba que encontrase el momento y los compañeros para ello.

¿Por qué? Bien sencillo. A nadie le gustan las travesías y la propuesta era realizar una travesía de tres largos con unos grados de V+, Vº y 6a. Con desconocido equipamiento, situación y calidad.
Pocos eran los que se animaban a ello ya que en una travesía, pasa miedo el primero, pasa miedo el segundo y el tercero también.
Pero por fin, este viernes pasado, Yago y Kiko se animaban a acompañarme en la vía y hasta se animarían a hacerse algún largo!

Nos repartimos los largos y Kiko se decide a darse el primero deseando estrenar sus nuevos Miura en la calcárea roca de Patones.


Pero engañado por la foto del croquis, descubre que no es tan recto este primer largo como parecía. pero consigue dejar atrás la cuerda y llegar a la reu sin mayores problemas.


Tras él vamos Yago y yo.


El siguiente largo se lo da Yago.


Un precioso Vº, disfrutón, de bonitos y aéreos movimientos que le deposita, con algunas dudas, en la siguiente reunión de la vía.


Luego le seguimos Kiko y yo.


Hasta apretarnos en la colgada reunión :D


Finalmente, el supuesto largo de 6a que queda, me lo daría yo.


Le entro con algo de miedo ya que hasta ahora los grados de los anteriores largos habían sido correctos y no tenía por qué pensar que en este iba a ser diferente.


Los movimientos son algo raros ya que tienes que darte los pasos para poder ver el siguiente agarre. Es lo que tienen los agujeros y la fisura en roca calcárea!

Según voy avanzando, localizo la chapa y luego busco la manera más sencilla de llegar a ella.
Me sorprende no encontrar pasos aislados más allá del V+.
Cuando ya llevo unos metros de travesía casi horizontal llego a un punto donde veo, a la altura de mis rodillas, una reunión que no me cuadra con los que había visto en el croquis de la guía. Intento ver si hay otra pero el lomo que tengo delante me impide ver más allá.


Decido llegar hasta esta reu y chapar para ver si desde allí descubro algo.

Para ello me tengo que dar un paso de equilibrio y fe que saco con algo de respeto.

Cuando llego a esta descubro que sobre mi cabeza, a un par de metros, hay otro de los parabolt similares a los que habíamos seguido hasta ahora.


Decidido voy hacia él, lo enlazo y continuo más arriba. En ese momento diviso la reu que nos corresponde, pasado el lomo.
Estoy algo alto y la reu me queda a los pies, por lo que tengo que realizar una travesía algo más fina hasta llegar a ella y finalmente poner el cabo de anclaje.

¡Reunión!


Tras recoger cuerda aseguro a Kiko y Yago que disfrutan de este largo final casi tanto como yo.


Luego rápel.


Y nos deleitamos en la Bar Manolo de Patones, con diferentes viandas.


Un buen día sin duda.


El resto del finde, al contrario que la mayoría de los mortales, lo pasaría con BigWall, intentando superar un record mundial de aseguramientos en 12 horas. :D


Creo que superé los 300...

Fue divertido aunque doloroso ;)

20 de febrero de 2012

NED FLANDERS DICE… (PATONES, PEDRIZA, CABRERA)

A pesar de que no he posteado últimamente nada de actividad y si mucho de material, no quiere decir que haya estado parado delante del ordenador. Lo cierto es que eso es justo lo que meno he hecho últimamente.
Bien es cierto que, como me suele pasar, he escalado menos de lo que me gustaría, pero en estas últimas semanas he estado, además, haciendo otras cosas.



Primer movimiento:
Patones es famoso por sus vías deportivas de un largo, pero hay algunas bellezas, de varios largos, escondidas en estas paredes calcáreas que son de poco uso por los que allí se suelen dejar caer.


De ellas, me hago con Yago, las que podemos y de todas sacamos algo en común: Sensación de clásica.



Segundo movimiento:
Invierno, (mucho) frío y entre semana, son las claves para estar solo en la Pedriza.



Esa combinación nos llevó a disfrutar de nuestro cercano paraíso de granito en la tierra.
Yago aun no conocía el sector de Musgogénesis, y yo hacía siglos que no iba, por lo que para allí que nos dirigimos a, de nuevo, hacer largos.


Una combinación de Baretoman con otras adyacentes es la elegida.
Luego también nos metemos en otras menos conocidas y codiciadas.


Tercer movimiento:
No es la primera ni será la última vez que vaya al Pico de la Miel y me decida por realizar una combinación de vías, siguiendo ciertas pautas: al menos una travesía y de grado “asequible”.


Con estas me metí, con Yago y Sergio, comenzando por la Piloto buscando llegar a ese raro y espectacular largo de las fisuras paralelas ascendentes que hay en su lomo izquierdo.


Para ello la idea inicial era la de meterse por el famoso y repetido primer largo de la “Piloto” y luego irse a la placa de la izquierda, que según los croquis que existen en la actualidad parece ser de la “Doble Cero”. Luego ya veíamos…
Este primero se lo da Sergio que hoy se sale de su rutina y deja el búlder para meterse de nuevo en la cuerda.

Tras él, decidido me paso a la placa, subo esquivando las puntiagudas ramas y las voy dejando a mi espalda hasta llegar a una chapa blanca sujeta por un oxidado párabolt.


La placa se ve que no le dan mucho trabajo y está bastante sucia.
Miro hacia atrás y las ramas parecen esperar atentas mi posible caída.
Tras tantear un rato la placa, no me decido y el coco me dice que huya de allí. Yo, como soy un tipo educado, le hago caso sin discutir y me paso al musgoso y sucio diedro que tiene a la derecha, donde hay tres chapas. Uso dos y la otra la dejo a la derecha para meterme debajo del techo y probar suerte a meterme de nuevo en el lomo desde ahí.
Tras asomarme, compruebo la inviabilidad de la opción ya que una manta de musgo en vertical pared lo cubre generosamente.
Hago travesía, a derechas, bajo el techo y me meto en el siguiente diedro. Me arrastro sobre él hasta que los compañeros me avisan de que ven una chapa a mi izquierda, por si quiero usarla.
Me asomo, saliendo del apretado diedro como puedo, y veo que la tengo demasiado abajo para llegar, pero la que hay más arriba sí que tiene posibilidades. Lo malo es que debo realizar un cambio de diedros muy delicado, y no veo lo que me voy a encontrar luego.

Tras delicados movimientos y de no escuchar hablar a mis compañeros que están demasiado atentos a lo que hago, salgo airoso del embolado y me subo al aéreo lomo.
Aun no he chapado.
Tras unos pocos gestos más, y estirándome a tope, por fin llego a enlazar mosquetón chapa y cuerda en una perfecta combinación.
De aquí, subirse a la derecha y salir hacia la izquierda para ascender por un caos de bloque y llegar a un árbol para hacer la reu, es coser y cantar.


Desde esta reu ya se divisa el largo de las fisuras paralelas y también se tiene una visión de una larguísima fisura, que bien podría ser una opción futura para realizar, si se llega aquí en otra combinación.


Pero nuestro objetivo no es esa larga fisura.

¿Os animáis alguno?


La travesía es sencilla, pero expuesta ya que es difícil de proteger y tan solo una chapa a medio camino y un tronco seco son el único seguro que me encuentro.


Para realizar la totalidad de la serie de fisuras paralelas que tiene este bonito largo, decido irme hasta la reu en la que comienza, chaparla y desde aquí comenzar.
Ello, además de más rozamiento, consigue los metros de cuerda se reduzca bastante lo cual obliga a asegurar siempre con cinta larga y escuetamente.

Tras 60m, llego a reu casi a tope de cuerda, con una sonrisa en los labios al saber que a mis compañeros les encantaría este largo.

Una vez los tres juntos, aquí se anima Yago a darle al final de esta combinación, de la que se encuentra se llega al mismo punto geodésico, donde nos asegura, tras hacer algunos divertidos pasos.


Contentos ya en la cima y viendo que aun quedaban luz y ganas, nos animamos aprovechar la carga que hemos llevado a la espalda para el otro plan que se encuentra en El Puro, a unos 100m del Pico de la Miel.


Para el ya lejano viaje a Yosemite la pusimos en nuestras manos a modo de entrenamiento y ahora tras ya unos pocos años de aquello, vuelvo a enfrentarme a ella, intentando que la suciedad mental del recuerdo, no empañe los estrictos movimientos que ellas requieren. No obstante, es casi imposible olvidarlo.


Me cuelgo a los chiquitines a ambos lados de mi nuevo arnés y me decido a medirme con "Metodología". Un 6b de fisura de puño y mano, que le gusta comer números 2, 3 y 4 además de algún que otro 5.


La estrategia para escalar una fisura, normalmente, son dos: Empotrando o en bavaresa.
A veces una combinación de ambas es la solución perfecta y otras solo una de ellas.
Solo de ti depende cual elijas y con ello te sea más sencilla o más difícil.

Yo me equivoque en mi elección y este es el resultado.

Comienzo la fisura en bavaresa, protejo con nº4 los primeros metros. Continuos en bavaresa, hasta que la fisura cambia. Protejo con nº3, continuo, sigo y nº4.


Una vez en el paso clave de la vía, protejo ya con un nº2 y lo intento.
Vuelo.
Un vuelo corto, a penas 3m.

Me cuelgo e intento recordar como la hice hace años…error.


Lo intento de nuevo y los pies me patinan haciéndolo en bavaresa.
Vuelo. De nuevo pocos metros.

Me cuelgo otra vez y me noto los brazos ya petados de todo el día.

El recuerdo me dice que me subía a la repisa de la izquierda y desde ahí iba subiendo hasta poner un pie en una fisura y el otro en la otra.

Del dicho al hecho hay mucho…techo.

Esta vez cambio de estrategia y empotro pies y manos hasta que consigo sacar el pie izquierdo a la repisa inclinada y desde ahí consigo salir a otra repisa donde descanso y recupero fuerzas.
Estoy en esta y aparece un amigo de Sergio que se la conoce.
Ni corto ni perezoso le consulto como salir de allí y que estaba cansado de volar.

“…puedes hacerla en bavaresa, por la derecha o empotrando que es más sencillo…”

Solo necesitaba un pequeño empujón de esperanza para de nuevo atacarla.

Hago la travesía comprobando lo lejos que quedó el nº2 en la fisura y me encaramo, como puedo, hasta que encuentro el equilibrio suficiente para sacar el nº5 y colocarlo, sin mirar, antes de darme el paso definitivo.


Comienzo como me han recomendado, pero el cuerpo se me abre al igual que las manos por el cansancio y decido cambiarme a bavaresa de nuevo.
Error.
Las baterías de mis músculos están agotadas y el glucógeno no ha conseguido generar la energía necesaria.

Sé que el nº5 está bajos mis pies, que lo he colocado sin mirar y no sé como está. De la misma manera sé que me espera un generoso vuelo, por lo que intento usar la energía que aun reside en mis brazos para colocarme lo mejor posible para la caída.

Yago…atento…pilla!

Vuelo, caigo y veo los metros de roca subir hasta que me detengo. Según me paro, miro hacia arriba para ver dónde y cómo está el número 5.
Terror es lo que siento al ver que como se ha virado.

Yago, no te muevas. Voy a asegurarme al nº2 que el 5…no está bien.

Tras unos segundo de tensión ya que si saltase, además del susto (lo de menos claro) serán los metros de más que caería sin saber bien si tocaría suelo, me engancho.

Tras revisar el nº5 en la distancia, ve que está anclado sin problemas ya que la caída había incluso mellado algo las levas y seguro me costado sacarlo de ahí.

Remonto.

Tras llegar a él, coloco por encima el otro nº5 y desatrampo el de la caída y ya desde aquí saco el paso no con poco esfuerzo pero con la sabiduría de la experiencia en el cuerpo y el tiempo suficiente para buscar energía alternativa en el cuerpo y terminar la vía a tope de adrenalina.

Tras bajar, Sergio se anima a darle de segundo.
Él elige otra estrategia: Empotrando y solo bavaresa en algún paso aislado.
Correcto.
La encadena.

Sin duda un buen día.
Como estos tan satisfactorios y de tanto aprendizaje concentrado, al menos mil! :D

10 de febrero de 2012

COJÍN CERVICAL DE COLUMNVERT (MATERIAL)

No sé vosotros pero yo, con estos 15 años de asegurar a la espalda, y más concretamente en las cervicales, llevaba ya tiempo planteándome adquirir esas famosas gafas que te hacen ver lo de arriba sin tener que doblar y comprimir esos pequeños huesos que nos sujetan los 7 kg que pesa la cabeza de un adulto. Pero como a todo el mundo el precio de estas echaba para atrás a cualquiera que no tuviera un poder adquisitivo en condiciones.
A esto además hay que añadir que las pocas veces que las he usado no me han convencido por lo irreal del visionado, al no saber si reaccionarás correctamente ante la caída de tu compañero.
Pero este post no es para hablar de esas gafas, sino del mi última y reciente adquisición de la que tengo cosas buenas que decir y otras mejorables.
Lo bueno de las mejorables es que se pueden solucionar, por parte de los creadores, de una manera muy sencilla.



Lo bueno:
Sin duda su sencillez es lo más destacable.
Por ambos lados lleva una parte de la cinta que lo rodea con hueco para que pases un mosquetón y te lo cuelgues del arnés para poder llevarlo. También lleva otra pequela cinta donde puedes poner ese mosquetón y dejarlo fijo para el transporte en pared.


También dispone de una cremallera, oculta por una solapa, que da la posibilidad de sacar la espuma interior y lavar la funda.
Su uso intuitivo y de muy fácil ajuste hace que enseguida compruebes lo eficaz que es para dejarte mirar para arriba, incluso con el casco puesto, descansando la cabeza en él.


Incorpora una bolsa de rejilla muy útil por dos motivos.


Evitar que se acumule mucha suciedad en su transporte y que cuando se guarde pueda estar aireada para que se seque la posible humedad que haya podido adquirir en su uso.

Lo mejorable:
Un problema que descubría nada más usarla es que la hebilla tiene una facilidad sorprendente de salirse de la cinta. Esto se solucionaría con un simple doblado y cosido del extremo de la cinta.


A este hecho no le di mayor importancia, hasta que un día, usándola en una vía de varios largos, a mi compañero se le salió y la hebilla cayó pared abajo al quitárselo para colgarlo del arnés, porque se le enganchó en el anillo ventral donde va enganchado mientras lo usas.
Por suerte, una vez en pie de vía lo encontramos. :D
Precisamente, a este mismo amigo, que es una gran escalador o escalador grande según se mire (197cm aprox), le resultaba demasiado corta la cinta. Una cinta más larga o añadir un tallaje, según la envergadura del escalador (S,M,L,XL), para evitar mucha cinta sobrando en los modelos para gente bajita, sería la solución.
Por último y ya por una cuestión de imagen, la etiqueta de lavado, donde además va la publicidad de los que realizan la construcción del cojín (posible motivo por el que va por fuera), debería ir dentro ya que desentona muchísimo con el resto del diseño.



Donde comprarla:
Existe una web donde se puede adquirir, pero también la he visto en el rocódromo de Espacio Acción, en Plumas Las Cruces y en el bar Manolo de Patones de abajo. Su precio en este último 22€.


Resumiendo: Muy contento con ello ya que se trata de algo sencillo pero muy práctico que evitará partirte el cuello, aunque deberás tener en cuenta tu altura si quieres usarlo.


7 de febrero de 2012

COMO CREAR UN CV DE ESCALADA

No es poca la gente que se plantea vivir de esto de la montaña y enseguida se da cuenta que no solo le son útiles los cursos que debe realizar para tener el título, sino que una vez lo tiene debe mostrar sus capacidades a las diferentes empresas del sector, sino es uno de esos locos emprendedores que lo arriesgan todo para montar una empresa.

Para ello, como con cualquier tipo de trabajo, requiere crear un curriculum/currículo/CV.

Haces una sencilla búsqueda en Internet y enseguida te salen miles de enlaces para crear Cvs, pero ninguno para crear uno relacionado con la montaña y mucho menos con la escalada.
Con este post pretendo arrojar algo de luz a este tedioso trabajo que requiere de no solo un ordenador, sino de una memoria prodigiosa sino eres de los que han ido apuntado todas la actividades realizadas o como es mi caso de disponer de un blog con unos pocos años de los 15 que llevo metido en esto.

Cada maestrillo tiene su “curriculumillo” yo tengo este que os presento.

Siguiendo las clásicas pautas de cualquier CV, se debe ser claro y concreto en lo que queremos contar y queremos que lea nuestro entrevistador de un raudo vistazo intentado destacar lo más importante sin poner rellenos inútiles que solo conseguirán que nuestro CV supere las temidas dos páginas.

Yo lo he dividido en siete apartados:

  1. Datos personales
  2. Formación
  3. Trabajos realizados
  4. Escaladas más representativas
  5. Niveles alcanzados
  6. Aperturas
  7. Otros

A continuación paso a definir cada uno de ellos.

DATOS PERSONALES
Lo normal: nombre, fecha de nacimiento, teléfono, mail, etc


FORMACIÓN
Lógicamente de nada servirá decir que tienes FP de Pastelería, Bollería y Repostería, por lo que se pondrá lo que tengas hecho relacionado con la escalada aunque sea poco.
Año, centro y nombre del curso serán suficientes.


TRABAJOS REALIZADOS
En los tiempos que corren, una gran mayoría de “profes” han hecho trabajos de “freelance” por lo que este es un tema delicado ya que muchos son difíciles de probar, así que es mejor, quizás, hablarlo directamente en la entrevista y solo poner los que se hayan realizado bajo algún tipo de contrato que demuestre lo realizado.
Nombre de la empresa, meses/año será suficiente. El resto ya lo contarás en la entrevista.


ESCALADAS MÁS REPRESENTATIVAS
Nuestra actividad se basa mucho en la fe, y no me refiere a la “fe pedricera” sino a que la manera de probar que se han realizado las actividades que pondremos son complicadas de demostrar, salvo que dispongas de un buen surtido de fotos que puedas llevar a la entrevista, hayas salido en algún artículo de alguna revista o como en mi caso tengas un blog y puedas enseñárselo o dejarle el enlace para que puedan verlo.
Mentir es absurdo ya que puedes jugarte la vida o jugársela a tus clientes.
Poniendo año, vía con grado propuesto en ese momento y lugar, serán imprescindibles.


NIVELES ALCANZADOS
Debemos ser conscientes de nuestras limitaciones y no mentir en esto ni tampoco quedarnos cortos. Debemos decir sencillamente lo que tenemos en la actualidad hecho.
Si haces bloque deberás añadir otro subgrupo en el que añadas lo mismo especificando que es grado de bloque.
Para ello este apartado lo he dividido en cuatro:

  • Máximo grado
    • El realizado trabajando la vía. Se definirá si es adherencia, desplome y tipo de roca ya que la cosa cambia según estas características. El nombre y lugar de la vía será interesante de poner.
  • Máximo A Vista
    • El realizado sin conocer la vía ni haberla visto escalar a nadie. También se definirá, tipo de roca, estilo de escalada, la vía y situación de esta.
  • Máximo en fisura
    • También trabajado. Tipo de roca, situación, nombre y lugar será lo que complemente la info.
  • Máximo en artificial
    • El nombre de la vía y situación bastará.
  • Grado confirmado
    • Este es el grado que puedes realizar A vista, en cualquier tipo de roca, estilo y escuela. No hace falta más que el grado en sí.

APERTURAS
Si las hubiera, se definirían en tres subgrupos:


  • Búlder
    • Si son pocos: Escuela, grados propuestos, y nombre, si lo tuviera, será más que suficiente.
  • Deportiva
    • Sí son pocas: Escuela, grados propuestos y nombre.
    • Sí son muchas, en una misma escuela, número de vías y sector/es.
    • Si son muchas en diferentes escuelas, nombre de escuelas y número en cada una de ellas
  • Clásica
    • Lo normal es que sean un puñado de vías, por lo que aquí si conviene poner, al igual que en el apartado de “Escaladas más representativas”, nombre de vía, grado y lugar donde se encuentran. Además, es interesante añadir si  se han usado expansivos o clavos, o solo se ha usado material de autoprotección movible, como son friends y fisureros.
OTROS
Aquí cada uno es libre de poner lo que crea conveniente para reforzar el interés que puede provocar el CV al entrevistador.


En mi caso, por si os sirve de referencia, he puesto el año en que comencé a escalar (1997), lo del blog, el libro escrito y el concurso de fotografía que gané en 2010.

¡Suerte en vuestra búsqueda!